NECESITO de ti: DEPENDENCIA EMOCIONAL

“ El instinto de los hombres no se basa en el amor en la sociedad, sino en el miedo a la soledad” – Arthur Schopenhauer.

Es curioso como los seres humanos tendemos a buscar el afecto y contacto con otras personas, es una necesidad emocional, psicológica, física y afectiva que suele guiar nuestro actuar en especial en etapas tempranas de la vida.

Según la Real Academia Española, el amor es definido como el sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser. Sin embargo, no todos amamos de la misma manera, los constructos relacionados al amor cambian de acuerdo a nuestras propias experiencias, carácter, autoestima, personalidad.etc.

El apego es un vínculo que creamos desde muy pequeños, normalmente desarrollado por la forma en la que conectamos con nuestro principal cuidador, esto tiende a definir nuestras necesidades dentro de nuestras relaciones y la forma en la que interactuamos dentro de estas.

Actualmente, el contacto continuo con otras personas es básico para la satisfacción emocional, pero un factor importante como las redes sociales, han influenciado de forma exponencial la necesidad de “ ser vistos”  y de recibir respuestas inmediatas a nuestras acciones.

En un mundo donde la autoestima depende de corazones virtuales enviados por personas que conocemos poco o nada, ejecutando interacciones banales que aparentan interés y reconocimiento; sin lugar a dudas, las relaciones han cambiado su dinámica.

En el 2018 el instituto de Andaluz de sexología y psicología se refirió a la dependencia emocional como la esclavitud del siglo XXI. En el 2022 la revista San Gregorio de la Universidadd Nacional de Huancavelica publicó un artículo sobre la dependencia emocional en estudiantes universitarios en aislamiento social obligatorio debido al Covid – 19, teniendo como conclusión que una de cada tres mujeres y uno de cada dos hombres se encuentran en el nivel moderado o servero de dependencia emocional hacia la pareja.

La dependencia emocional hace referencia a un apego patológico, un estado de subordinación extrema hacia otra persona casi siempre debido a la necesidad de mantener el vínculo emocional y el afecto de esta.

Normalmente relacionada a una autoestima baja, la persona con dependencia emocional abandona su propio YO para poder “ encajar” en un papel que piensan debe cumplir dentro de una relación disfuncional en la que las decisiones son tomadas en su mayoría por la otra persona.

También se presenta un miedo exagerado a la separación, culpabilidad, ansiedad, miedo a la soledad, control de la pareja, celos y ruptura de relaciones interpersonales con amigos o familia.

La teoría define 3 tipos de dependencia emocional:

Dependiente afectivo. Asume el rol de demandante y necesitado, requiere atención, afecto y valoración.

Dependiente instrumental. Asume el rol necesitado, y demanda protección, orientación y cuidados.

Codependiente. Su rol es el de dador, salvador y ayudado de la otra persona. Provoca o acrecienta la dependencia del otro para asegurar su permanencia y convertirse en una persona imprescindible.

Claves para una relación sana

Es importante recordar que dentro de una relación sana la comunicación es abierta, viene en dos sentidos, se escucha y se es escuchado, sin miedo a juicios.

Hay mucho respeto y  lealtad mutuos que crean un lazo de confianza y seguridad dentro del vínculo; además, es vital el tiempo de calidad y el entendimiento de lo que la otra persona necesita para sentirse valorada ( lenguajes del amor ), aceptar que habrá diferencias, tener tiempo para uno mismo y cultivar las relaciones con la familia y amigos.

En la película “ las ventajas de ser invisible” el personaje del profesor Bill Anderson, dijo: “ aceptamos el amor que creemos merecer”, quererse a uno mismo es la base en la que cementaremos todas las relaciones y vínculos que crearemos a lo largo de nuestras vidas.

No hay que olvidar que la base para generar relaciones saludables, son el autoconocimiento y la autoestima, aceptar lo que somos y ser conscientes de lo que podemos mejorar, respetar nuestros límites y estar abiertos a respetar los límites de los demás.

Referencias

Real Academia Española. (2014). Diccionario de la lengua española (23a ed.).

Castelló, J. (2012). La superación de la dependencia emocional: Cómo impedir que el amor se convierta en un suplicio. Ediciones Corona Borealis.

Castro, S. (6 de febrero de 2024). Dependencia emocional no es amor. Instituto Europeo de Psicología Positiva.

Guillen, A ( 2024). Que es la dependencia emocional. Blog: PSICOPARTNER

Oré. J ( 2022). Dependencia emocional en estudiantes universitarios en aislamiento social obligatorio por Covid-19.Revista San Gregorio. Recuperado de:. https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/8839103.pdf

ReiDoCrea. Revista electrónica de investigación Docencia Creativa. Volumen 2. Páginas 143-148.

«Disociación, el escape que necesitamos»

Imagina esto: te encuentras en medio de una discusión familiar, un clásico, y sin darte cuenta, de repente te encuentras mirando al vacío como si estuvieras paralizado(a). No es que no te importe lo que está pasando, es solo que, de alguna manera, tu mente decide tomar un pequeño descanso…mental, por supuesto. Esto me pasó hace poco. Mis hermanos estaban discutiendo como si no hubiera un mañana y, sin querer, mi cerebro hizo «click» y me desconecté. Mi cuerpo seguía allí, pero mi mente se fue a dar una vuelta, quien sabe a donde. ¿Te suena familiar?

¡No todo es tan malo como parece!

La disociación, es un mecanismo tan humano que nos permite «escapar» de una situación emocionalmente abrumadora, no es algo que deba ser visto necesariamente como algo negativo. En muchos casos, es una respuesta adaptativa, algo que nuestro cerebro hace para protegernos, para sobrellevar momentos de alta tensión emocional.

Pero, claro, en exceso no es tan bueno. Cuando se vuelve habitual o excesiva, puede interferir con nuestra capacidad para conectar con la realidad y las personas que nos rodean, por ejemplo, a veces me pasa que cuando leo un libro, tengo que volver a leer la misma oración varias veces, es como si mis ojos estuvieran en el papel, pero mi mente estuviera en otro lado o a veces, me doy cuenta de que estoy haciendo algo en piloto automático, como cuando camino sin darme cuenta de a dónde voy, o de repente llegó a un lugar sin recordar cómo llegué allí. ¿También te pasa?

La disociación, como ves, puede ir desde una simple desconexión momentánea hasta episodios más largos, pero, en su forma más momentánea, es una forma de protegernos cuando las cosas se vuelven emocionalmente complejas, cuando estamos sobreestimulados, o cuando pasamos por mucho estrés.

¿Por qué a veces no es tan funcional?

La disociación puede ser útil como una estrategia rápida para lidiar con el estrés, pero cuando se convierte en un mecanismo de defensa habitual, puede dejar de ser funcional.

Si tu mente se desconecta cada vez que algo se vuelve incómodo o abrumador, es probable que evites procesar las emociones que necesitas enfrentar. A largo plazo, esto puede hacer que las emociones no resueltas se acumulen y que te desconectes cada vez más de la realidad. Además, cuando la disociación se vuelve frecuente, puede afectar tus relaciones, ya que estar presente y conectar con los demás se vuelve más difícil.

Si «huyes» mentalmente en una conversación o durante una actividad importante, puedes perderte momentos importantes de conexión emocional con los demás. Y, aunque es comprensible que quieras evitar el conflicto o la incomodidad, a largo plazo, esto puede generar sentimientos de aislamiento o desconexión.

Es importante recalcar que en casos de trauma severo, como abuso o violencia, la disociación puede ser una respuesta de supervivencia y es un tema mucho más complejo del que se redacta en este artículo.

En estos casos la mente se «desconecta» para protegerse del dolor insoportable de la experiencia. Este tipo de disociación, aunque adaptativa en ese momento, puede volverse crónica y dificultar el proceso de sanación. En situaciones de estrés postraumático (TEPT), por ejemplo, la disociación puede ser un síntoma persistente, ya que la mente busca escapar de las emociones y recuerdos traumáticos que no han sido procesados.

¿Cómo lidiar con la disociación?

Hay técnicas muy útiles para traer de vuelta nuestra atención al presente y hacer que nuestro cerebro se conecte nuevamente al «aquí y ahora».

  1. Respiración profunda: Cuando me siento «fuera de mí misma», una de las mejores maneras de regresar al presente es parar un momento y tomar una respiración profunda. Inhala por la nariz, llena tu abdomen de aire (no solo el pecho) y exhala lentamente por la boca. Hazlo varias veces. Esto ayuda a calmar el sistema nervioso y a traer tu foco de atención al aquí y al ahora.
  2. Grounding (o enraizamiento): Esta es una técnica sencilla y poderosa. Se trata de usar nuestros sentidos para estar en el presente, por ejemplo, si sientes que te estás desconectando, puedes tocar un objeto con textura (como una taza, una bola antiestrés o algo que esté cerca), sentir su temperatura o peso. Incluso puedes detenerte a notar cosas en tu entorno: «¿Qué veo? ¿Qué escucho? ¿Qué huelo?» Esto te conecta con el mundo real y te ayuda a salir del piloto automático.
  3. Validación emocional: Hacer una pausa y reconocer en voz alta: “Ok, estoy disociando porque esta situación me está abrumando”, “aguanta, estoy disociando” es un primer paso. Validar tus emociones (incluso las que te hacen querer huir) puede ayudar a disminuir su intensidad.
  4. Movimientos físicos: A veces, simplemente mover el cuerpo ayuda a liberar tensiones. Caminar, estirarse o incluso saltar un poco en el lugar puede hacer maravillas para devolver la atención al cuerpo y salir de ese «mood automatico».
  5. Practicar mindfulness o atención plena: Hacer ejercicios pequeños de mindfulness en tu día a día, como estar 5 minutos completamente presente mientras tomas tu café, disfrutas de una caminata o te bañas, puede ayudarte a entrenar tu cerebro para estar más consciente y menos propenso a desconectarse en situaciones difíciles.

Todos tenemos nuestras formas de lidiar con lo que nos abruma. Sin embargo, aprender a manejarla y a conectar nuevamente con la realidad cuando sea necesario, es necesario  para mantener un balance emocional óptimo.

«Así que, la próxima vez que tu mente se pierda en un viaje astral, dale la bienvenida con una sonrisa y dile: “aquí estás de nuevo, disociando”. Pero también recuerda traer tu mente al “aquí y ahora”, con cariño, respeto y si es necesario, un poco de humor. “oye Ale, pellizca tu mano o toca tu nariz”. Porque, al fin y al cabo, ¿quién no se ha escapado un poco de vez en cuando?

“La vida no es un problema a ser resuelto, sino una realidad a experimentar”

 Alan Watts

¿Cómo perder tu salud mental en 10 días?

  • No he comido desde que terminamos…
  • Bien por ti. Escribe acerca de eso
  • No usaré mi vida privada para una historia
  • Lo entiendo ¿quién usará la vida privada de Michelle para una historia?
  • Yo lo haré
  • Bien
  • No, no, no. Lana con todo respeto, Lori no tiene porque meterse en mi vida privada y yo no puedo permitirlo
  • Yo lo haré
  • ¿Qué?
  • Yo intentaré hacerlo y tú serás mi inspiración
  • ¿Para?
  • Mira a Michelle. Es una gran china ¿no?
  • Una mujer extraordinaria, pero tiene un problema con sus relaciones personales y no sabe lo que esta haciendo mal, al igual que muchos lectores
  • Sigue
  • Así que estaba pensando en que podría empezar a salir con un chico y luego alejarlo usando los clásicos errores que las mujeres como Michelle cometen todo el tiempo. Llevare un diario de eso y se llamará como encontrar tu amor al revés.
  • Que no hacer…
  • Como perder a un hombre en 10 días. Sí, hazlo
How to Lose a Guy in 10 Days dir. Donald Petrie (2003)

Basándonos en la premisa de la peli How to Lose a Guy in 10 Days (2003) en este artículo abordaremos lo que NO debes hacer si quieres mantener una buena salud mental 😊

¿Cómo perder tu salud mental en 10 días?

How to Lose a Guy in 10 Days dir. Donald Petrie (2003)

  1. NO TE HAGAS CASO

Para empezar, sea lo que sea que estes sintiendo invalídalo, no identifiques que emoción estas sintiendo y si puedes distráete saliendo a fiestas de manera descontrolada combinando tragos o teniendo relaciones casuales.

El diario de Bridget Jones dir. Sharon Maguire (2001)

2. DEJA QUE LA ANSIEDAD TE GANE

Sobrepiensa, ¡sobrepiensa! para que los pensamientos te invadan y abrumen durante tu día y que se te imposibilite ser productiva. Además, hazlo notar a los demás para que ellos se vean obligados a tomar distancia de ti.

Gossip Girl dir. Eduardo Garza (2007)

3. OLVIDA ESO DE SER FUNCIONAL

Falta al trabajo o a la escuela y permítete ser despedido o suspendido.

Sex Education dir. Ben Taylor (2019)

4. AÍSLATE

Para que estar con amigos o familia si puedes estar completamente solo/a.

To the Bone dir. Marti Noxon (2017)

5. ATRACONES

Date atracones de comida, ¿Para qué alimentarnos saludablemente si podemos optar por comer muchas golosinas y frituras?

Insatiable dir. Andrew Fleming (2018)

6. DESCUÌDATE

No te bañes, ni te pongas linda

The Office Temp. 9 dir. Randall Einhorn (2005)

7. CHAO AMIGOS Y FAMILIA

No acudas a tu red de apoyo como amigos y familia, pelea con ellos

Euphoria dir. Sam Levinson (2019)

8. NO PASA NADA

Finge que todo está muy bien

Fleabag dir. Harry Bradbeer & Tim Kirkby (2016)

9. NO LE TOMES IMPORTANCIA

No practiques ejercicios de meditación para controlar tus emociones ni mucho menos acudir a terapia para conectar tu niño interior para tratar de entender de dónde surgen tus inseguridades, traumas o estilos de apego.

Pequeña grandes amigas dir. Boaz Yakin (2003)

10. SIGUE ASÍ

Repite todo lo anterior y en 10 días… ¡habrás perdido tu salud mental!

Pearl dir. Ti West (2022)

Este artículo de cierto modo confrontativo y sarcástico a diferencia de un articulo explicativo sobre lo que hay que hacer busca promover una conciencia sobre nuestras acciones en torno a nosotros mismos, conciencia que no tuvieron las protagonistas de las películas sugeridas.

Estas 10 recomendaciones harán que lo compruebes (risas).

Buen día.

«Encontrando la Luz en el Caos: Resiliencia y Crecimiento personal «

La vida está llena de altibajos, y muchas veces, la psicología parece deslizarse entre los dedos, como un río que fluye rápidamente. Sin embargo, en medio de la oscuridad, hay oportunidades para el crecimiento y la resiliencia. En este artículo, explicaremos cómo podemos encontrar luz en el caos a través de la psicología positiva, utilizando los versos de mi poema como hilo conductor.

La psicología se desliza y me atropella,

y aunque a veces no me importe y la pierda,

 sé que la encontraré de nuevo,

 que aparece y que se esconde,

 que se marcha y que se queda,

 que es pregunta y es respuesta

, que es mi oscuridad, y es estrella,

ella se peina el alma y me la enreda

va conmigo, pero no sé a dónde va,

es mi rival, mi compañera,

qué está tan dentro y está tan fuera,

sé que volveré a perderle y la encontraré de nuevo

pero con otro rostro y otro nombre diferente y otro cuerpo…

Como dice la canción……

1. La Dualidad de la Experiencia Psicológica

La frase «La psicología se desliza y me atropella» refleja la naturaleza dinámica y a veces abrumadora de nuestras emociones y pensamientos. Esta dualidad se manifiesta en la psicología positiva, donde se reconoce que las emociones negativas son parte integral de la experiencia humana.

Reflexiona sobre un momento reciente en el que te sentiste abrumado por tus emociones. ¿Cómo lo manejaste?

Tristeza

2. La Oscuridad y la Luz

Cuando digo «que es mi oscuridad y es estrella», se evoca la idea de que incluso en los momentos más oscuros, hay destellos de esperanza y oportunidades de crecimiento. Según Martin Seligman, la psicología positiva se centra en cultivar emociones positivas y encontrar significado en la vida, lo que nos permite brillar, incluso cuando enfrentamos desafíos.

Flor de Loto

3. La Resiliencia como Compañera de Vida

«La psicología va conmigo, pero no sé dónde va». Esta idea encapsula la incertidumbre que a menudo sentimos en nuestro viaje personal. La resiliencia, que se desarrolla a través de las dificultades, se convierte en nuestra compañera constante. Barbara Fredrickson, en su teoría de la ampliación y construcción, sugiere que las emociones positivas pueden ayudar a construir recursos personales que nos fortalezcan en tiempos de crisis.

Resiliencia

4. La Evolución del Yo

«Volveré a perderla y la encontraré de nuevo, pero con otro rostro y otro nombre». Este verso refleja la idea de que el crecimiento personal es un viaje continuo. A lo largo de nuestras vidas, nuestras identidades cambian y evolucionan. Sonja Lyubomirsky nos recuerda que nuestras acciones pueden influir en nuestro bienestar, permitiéndonos reinventarnos y crecer a través de las experiencias.

Ave Fénix

5. Cultivando un Futuro Brillante

La conexión entre «la pregunta y la respuesta» sugiere que la búsqueda de respuestas en la psicología puede ser un camino hacia el autoconocimiento. Christopher Peterson enfatiza la importancia de identificar nuestras fortalezas personales, lo que nos ayuda a encontrar nuestro propósito y a construir una vida significativa.

Buda

Conclusión: Creciendo Desde el Caos

A medida que navegamos por el caos de nuestras emociones y experiencias, recordemos que la psicología positiva nos ofrece herramientas valiosas para cultivar la resiliencia, encontrar significado y crecer. Al compartir nuestras historias y reflexiones, no solo nos ayudamos a nosotros mismos, sino que también inspiramos a otros a encontrar su luz en la oscuridad.

Recuerda que cada experiencia, cada emoción, contribuye a nuestra historia única. La psicología está aquí, tanto dentro como fuera, como compañera y guía en este viaje.

¿Cómo encuentras luz en tus momentos de oscuridad? Comparte tus reflexiones en los comentarios y acompáñame en este viaje de autodescubrimiento.